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— Si sigue tirando su basura en mi jardín, no tendré más remedio que dar parte a la policía.
— Por mi como si se la da toda.
— Camarero ¿cuál es la especialidad de la casa?
— El bistec "James Bond".
— Muy bien ¿y cómo es?
— Frío, duro y con nervios de acero.
Un matrimonio que viaja en coche tiene una discusión y después de un rato de silencio el marido ve dos burros a un lado del camino y le dice a la mujer:
— ¿Familiares tuyos?
Y la mujer le contesta:
— Sí, mis suegros.
¿Cuál es el colmo de un tuerto?
Llamarse Casimiro.
— Papá, ¿qué se siente al tener un hijo tan listo?
— No lo sé, pregúntale a tu abuelo.
— Quiero apostatar
— Pero oiga, esto es un casino.
— Yaya lo sesé ¡Totodo al nenegro!
Mi novia me ha pedido tiempo y distancia, creo que quiere calcular la velocidad.
— He hablado con mi mujer y le he dicho que ella no es quién para juzgar a mis amigos, y que saldré con ellos cuando me dé la gana.
— Claro que si ¿y que te ha contestado?
— Que no murmure entre dientes, que no se me entiende nada.
— Me han dicho que eres bipolar.
— ¿A ti que te importa imbécil? Y gracias por el interés, eres un amor.
— Buenos días ¿es aquí el club de los tiquismiquis?
— La asociación.
— ¿Pero al final cómo se llama, Emilio o Ismael?
— Mira mamá, déjalo, llámalo correo electrónico y no te compliques.
— Manolo, qué pesado estás ¡que te metas en el féretro!
— ¡Que no, que no estoy muerto!
— Si claro, vas a saber tu más que el doctor.
— Soldado Ramírez, ¿dónde va usted tan raudo y circunspecto?
— Iba a mear, pero ahora voy a por un diccionario.
Hoy he puesto mi primera lavadora, pero al tirar de la cadena ha desaparecido la ropa.
— ¿Sabes en qué se diferencia el papel higiénico y las cortinas del baño?
— No, no lo sé.
— ¡Ajá! ¡Entonces fuiste tú!
Dos curas hablando de sus cosas:
— ¿Tu crees que que algún día veremos a los curas poder contraer matrimonio?
— Hombre, nosotros a lo mejor no, quizás nuestros hijos.
— Hola, buenas tardes, vengo a pedir la mano de su hija.
— ¿Ha visto ya a mi mujer?
— Sí, pero prefiero a su hija.
— ¿Cuántas horas te pasas en el trabajo cada día?
— Ocho.
— ¿Computadas?
— Con putadas, diez.
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