— ¿Tiene camión propio?
— Si, señor.
— ¿Qué tara tiene?
— ¿Yo? Ninguna.
— El camión.
— Le falla un intermitente, pero nada más.
— Que cuánta carga soporta.
— Tengo dos hijos mayores que no se van de casa.
— ¿Es tonto?
— ¿Quién, el camión o yo?
— Cierre por fuera.